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viernes, 21 de diciembre de 2012

FELIZ NAVIDAD Y MEJOR AÑO NUEVO!!!

A mis queridos Todos:

Como cada año por estas fechas, se atosigan las emociones, los horarios, la comidas, las compras de última hora, las incertidumbres, algunas certezas, los cambios...Siempre queremos cambiar algo para el Año Nuevo, para recomenzar con renovadas ilusiones y entusiasmos el quehacer cotidiano...De lo cotidiano nos nutrimos y crecemos, aprendemos lecciones que suspendemos y tenemos que repetir hasta aprobarlas al menos por los pelos, para darnos cuenta que no solo hay que saberse la teoría sino ponerla en práctica, ajjajaja, te pillé, a que sí?! Pues vaya por la práctica esta felicitación de Navidad...

Que consigamos poner en práctica todos nuestros anhelos, sueños y esperanzas, que la Paz, la Serenidad y el Respeto por los otros no se queden en lo teórico, sino que a base de practicar y practicar nos llegue a salir de manera natural y sin esfuerzo...La constancia vence todas las dificultades y el amor todo lo puede...Pongamos mucho amor en lo que hagamos y confiemos...después de todo, si hemos llegado hasta aquí, ¿para qué rendirnos? ¿qué sentido tiene vivir abatidos y fustigados? al mal tiempo buena cara, y si hace mucho frío por esos mundos de hemisferio norte, vénganse pal sur que estamos a 21 de diciembre con un sol esplédido y 24º de temperatura, en la costa, claro...

Espero que CAMPOFRÍO no se moleste por compartir su magnífica felicitación de Navidad de este año.

Gracias a todos por haber estado un año más en mi vida y permitirme estar en las suyas.

Un abrazo enorme, María                                      Pinchen en el enlace, por favor...

http://youtu.be/lX5Ff3fboFc


lunes, 17 de diciembre de 2012

Origen y consecuencias de la violencia de género

Bebé, niño- niña, hombre- mujer, la necesidad humana de etiquetar y clasificarlo todo empieza en el instante en que una mujer sabe que está embarazada…según el sexo será tratado, diferenciado y enrolado de por vida…mientras es bebé tiene esperanza de libertad.

Desde que el hombre, como especie, es ser humano, las diferencias corporales y biológicas entre hombre y mujer han marcado el papel de cada uno en la sociedad grande o pequeña. La mujer es la única que puede engendrar y tener hijos y debido a la inexistencia de biberones en la prehistoria, la única que podía alimentarlos. El hombre salía a buscar comida para toda la familia y dicen que de ahí viene el hecho de que el hombre prefiera salir de casa y otear el horizonte en busca de caza, mientras la mujer desarrolla la visión más corta y con mayor ángulo, para que no se le escapase ninguno de los críos.

Como el hombre y la mujer no solo son cromosomas ni fruto de la educación y la cultura social de un pueblo, como quiera que algo en su interior hace que su inteligencia natural les pique la curiosidad de un mundo más allá de la crianza y la caza, surgen las reivindicaciones, las exigencias de cambio, los miedos y, como no, la violencia…violencia del macho sobre la hembra que se rebela para no perder su estatus ni sus privilegios. Si la hembra sale de casa, ¿quién hará la comida para cuando él vuelva? Si sale de casa sin protección, cualquier otro macho podrá mirarla y desearla incluso…No es solo una cuestión religiosa, eso viene para controlar a los que persisten en una actitud díscola y desafiante ante lo terrenal. Y cuando la fuerza bruta no basta, la amenaza se vuelve verbal. El poder del lenguaje es tanto o más fuerte que los golpes. Y así se va transmitiendo de generación en generación una manera de hablar con y de las mujeres que es absolutamente adquirido por la cultura social, la educación y la propia falta de autoestima.

La evidencia empírica muestra que tanto las mujeres como los hombres presentan gran diversidad intragrupo, es decir, que son muy distintas entre sí y también los hombres, y que hombres y mujeres son similares en la mayor parte de las variables psicológicas, entonces: ¿por qué seguimos empeñándonos en etiquetarnos y limitarnos?


Atardecer en la costa norte de Tenerife.


lunes, 19 de noviembre de 2012

La condición humana

Valentina me acaba de llamar emocionada: por fin, pasó la barrera física y psicológica del número que marcaba la pesa de su cuarto de baño. Contenta como unas castañuelas fue al armario de los vestidos de fiesta y se probó el de seda verde entallado del año pum. Genial! Ya podrían celebrar la fiesta que tenían en mente y en la recámara desde hace un par de años. Esto que puede parecer una tremenda frivolidad, y más en estos tiempos tan convulsos que corren, no lo es. Puede ser algo ñoño como ejemplo, pero el fondo es la satisfacción por un esfuerzo realizado. Indudablemente, el hecho de no haber cogido un avión en los últimos dos meses ha tenido algo que ver y es que el aire engorda, como le confirma la doctora, porque lo que hay que hacer es comer bien y solo lo que nos sienta bien, en eso estamos muy de acuerdo. Seguimos contándonos cosas y resulta que este otoño está bien movido y pasado por agua, necesaria y querida, pero tan de golpe y continuada que no da tregua para una adaptación al cambio de estación. Las carreteras cortadas, los pueblos incomunicados y una pesadez corporal, mental y emocional parecen ser los síntomas premonitorios de un final de año aún más movidito. Se auguran cambios muy importantes y eso, por supuesto, genera gran incertidumbre y ansiedad. Sin embargo, no siempre el cambio es para peor. La mayoría de las veces es para mejor, aunque nos cueste un sufrimiento aceptarlo. Comentamos que estas últimas semanas en que no he compartido nada en el blog, no ha sido por sequía informativa, sino por lluvias torrenciales de actividades y trabajo, afortunadamente. La obra social de Cajacanarias tiene un “Otoño Cultural” muy atractivo, como suele ser, y entre otros han venido Ian Gibson, el biógrafo irlandés afincado en España desde el siglo pasado dando un repaso con Juan Cruz a la historia y las historias de poetas y artistas como Lorca, Dalí y Buñuel, a la libertad de conciencia de la que habla Cervantes en "El Quijote", de la dureza de la vida en España y dejando en el aire la pregunta ¿cuándo ha tenido paz este país?; Tomatito con su guitarreo magnífico y su fantástico cuadro flamenco con bailaora incluida, elegante y con fuerza, preciosa; y Vicente Del Bosque con su permanente sonrisa y su buen talante, a pesar del ajetreado viaje que había tenido bajo un temporal de lluvia y mala mar de Ceuta – Algeciras- Sevilla- Tenerife- El Hierro, donde por fin el tiempo les dio una mini-tregua y pudieron disfrutar de los paisajes y el cariño de la gente de la isla del meridiano, sin usar paraguas. Ya de vuelta en Tenerife dialogó con Anelio Rodríguez sobre la condición humana en un encuentro entrañable y sin prisas, reivindicando la lentitud frente al correcorre frenético de estos tiempos.

Condición humana que hay que modelar poco a poco con conocimiento y cariño, mejorando la comunicación personal, en la empresa, en la sociedad, para ser más felices y vivir en un mundo mejor, más equitativo, más justo, más solidario, comprensivo y libre. Utilizando herramientas como la Inteligencia Emocional, la Programación Neurolingüistica, la Comunicación para el Desarrollo, la Meditación y el Dzogchen (“Total perfección”) como explica en su charla el lama tibetano Chögyal Namkhai Norbu, y haciendo buen uso de la nuevas tecnologías y las redes sociales quizás consigamos alcanzar la Utopía...



Ahora, si me lo permiten, me voy a ver a Rafael en el Auditorio de Tenerife…Escándaloooo

miércoles, 10 de octubre de 2012

Entre armarios y Fito & Fitipaldis


Cae la tarde. El sol luce su amarillo naranja a punto de ocultarse en la línea del horizonte. Otro día que pasa acumulando experiencias, emociones, vida. Todas esas cosas que se van guardando en los armarios y que de vez en cuando sacamos para darles un poco de aire, quitarles el moho, limpiar a fondo y volver a guardar como preciosos tesoros testigos de nuestras vivencias. Trajes de faralaes, los de gitana de toda la vida infantil, cotillones sobrantes de fines de años pasados que se usarán sustituyendo algún olvido futuro, zapatos antiguos y algunos  viejos que de tan cómodos nos negamos a desahuciar, abrigos y gabardinas que se mueren de la pena por no salir de paseo con este calor que nos derrite y que no quiere irse para dejar paso al otoño y éste al invierno…Tirar y soltar pasado para dejar sitio a lo tiene que venir, dicen…pero como esas prendas cómodas y entrañables que nadie más que tu sabe de su agasajo, que se te acoplan al cuerpo y a tu piel como ninguna otra, guardamos recuerdos, canciones, músicas, letras y libros que nos han hecho sentir únicos, especiales, entendidos y comprendidos en medio de la algarabía del día a día. Esas cosas no se pueden tirar a la basura o en un contenedor de reciclado porque forman parte de nosotros y solo nosotros sabemos darle un nuevo uso,  rescatar del fondo del armario aquello que estuvo pasado de moda y que vuelve con rabiosa actualidad. Entre los armarios y el campo de batalla que durante un par de días se monta en la casa, hay una pausa que te saca de ese mundo en el que solo para ti tiene o no sentido lo que encuentras. Un conciertazo de Fito & Fitipaldis te mete otra vez en tus armarios, como cuando eras pequeño y te encerrabas en ellos para jugar al escondite o simplemente aislarte con tus muñecos…No todos reaccionamos igual ante el mismo estímulo. Mientras unos no podían reprimir las ganas de ponerse de pie y rockanrrolear, otros paladeaban en silencio las románticas letras y los acordes de unos músicos magníficos que no solo tocan los más variados instrumentos de una gran banda, sino la fibra de cada uno de los asistentes. Fito y Fitipaldis también parecían haber estado hurgando en sus armarios, porque tocaron canciones que hacía tiempo que no tocaban. Incluso algunas tenían ritmos reciclados, bueno, versiones y "transformers". Fue una experiencia genial que guardaremos en alguno de nuestros cajones para sacarla y airearla de vez en cuando…Gracias… 

Concierto de Fito & Fitipaldis en el Auditorio de Tenerife el de octubre de 2012.-

domingo, 30 de septiembre de 2012

Sobre la prudencia

Hartos, inmóviles, maniatados, con miedo y sin esperanza. Así pasan los días, los meses, los años y el aire rancio de tanto ser respirado empieza a envenenarnos. Asfixiados, la tos nos golpea y hace que nuestros órganos reaccionen reactivando el flujo natural del aire inspirado- expirado, de la energía espiritual, sexual y cósmica…de la vida, en definitiva, que quiere ser vivida por decisiones propias y no ajenas, con sus buenos momentos y los no tanto, que hacen de cada uno un ser único e irremplazable. Un ser que busca vivir tranquilo, cumplir con obligaciones, disfrutar de sus derechos y mantener a distancia los 7 pecados capitales…pero siempre hay alguien, otro ser único que se confunde con otros de su misma calaña, que cede a la tentación, que se entretiene molestando, rumiando cómo amargarle la vida al otro…Es la condición humana y en cada uno hay de todo como en botica, pero como actores sobre el escenario, un papel representado, unas actitudes mostradas, no significan una forma de ser. ¿Cuántas veces no hemos pensado que alguien es tonto – de tontería- porque no saluda por la calle y luego nos enteramos de que no ve sin gafas? Condición humana…juzgamos con una facilidad y una frivolidad pasmosa, sacamos conclusiones sin tener todos los argumentos y nos posicionamos sin necesidad frente a una causa que no es ni mejor ni peor…Aferrados a una situación insostenible en lugar de aceptar que hay que dejarla caer para poder construir algo nuevo en su lugar, como una casa que se derrumba, podridos sus cimientos, cansada de tanto mantenimiento inútil…Tratemos de salvar lo salvable, lo que verdaderamente merece la pena. Como humanos tenemos las condiciones, las capacidades para descubrir lo bello, lo verdadero, lo esencial y preservarlo como un tesoro rescatándolo de las manos de los piratas, que solo le dan el valor material…

Circula la idea de la necesidad de posicionarse, de crear nuevas formas de pensar, nuevos partidos y las revueltas recorren el planeta como efecto dominó. Repetimos acciones, situaciones, aciertos y equivocaciones, pero algo tendremos que haber aprendido. Prudencia. Prudencia definida por los clásicos como el arte de obrar bien en cada caso…La prudencia como solución de cualquier conflicto…La capacidad de resolver un conflicto sin lucha es lo que distingue al prudente del ignorante, afirma Sun Tzu en “el arte de la guerra” ...Ganan los que saben cuándo luchar y cuándo no…Prudencia, mucha prudencia…

Playa del Socorro, Tenerife

viernes, 14 de septiembre de 2012

Santísimo Cristo de La Laguna


Foto: Santísimo Cristo de La Laguna, A.J.

Presencia poderosa, sereno de ánimos, confidente íntimo, crucificado bondadoso y compasivo, El Cristo de La Laguna es para los creyentes cristianos mucho más que una bellísima talla en madera. Incluso los no muy dados a esas cosas misteriosas del más allá, sienten en el acá más próximo su fuerza sustentadora en los momentos de dolor, de pérdida y desasosiego. Siempre está…sin tener en cuenta si le fallas, si te equivocas, si pierdes los papeles, si eliges el camino menos bueno…siempre está. Hace unos meses terminaron de limpiarle los miasmas acumulados durante 5 siglos de penas y lágrimas compartidas, de barnices que con la mejor voluntad le fueron untando para darle más brillo, asfixiando su esencia… La nobleza se compara en el lenguaje de los hombres como “de buena madera”, no se pica, no se pudre, en relación con los elementos que hay en su entorno. Pero debe cuidarse, como todo en la vida y en la muerte… dejarle respirar un aire más limpio. Restauradas las grietas, el mechón caído y sostenido por un alambre, por encima de opiniones sobre su menos tostado color, esta magna imagen piadosamente esculpida por Louis Der Vule hacia el 1514, pasea su luz por las calles laguneras, bajo un sol de justicia, engalanadas en su honor, brillando su humildad, su compasión y su paciencia sobre la plata pulida, más resplandeciente que nunca…¡Feliz dia!
Santísimo Cristo de La Laguna, foto de A.J.

viernes, 7 de septiembre de 2012

De Arabia y Alicia en el País de la maravillas

Solo le faltó ver la luna de color azul. Alicia llegó del país de la maravillas abrumada por las experiencias vividas durante su último viaje. Arabia. Historias de cuentos infantiles y no tan infantiles, de beduinos, camellos, arena, mar rojo, petróleo y la alternativa para cuando se les agote, “Alá quiera que en mucho tiempo”, el gas…Un país de tópicos que sigilosamente y sin muchos aspavientos va cambiando de dentro afuera, aunque aún no es común a luz pública, las mujeres que quieren estudian, se forman y trabajan. No están esperando a una ciudad para mujeres que dicen van a construir para que puedan desarrollar su parte profesional sin perturbar el mundo de los hombres. Hombres de blanco impoluto, planchados con almidón y adornados a gusto del particular con sus pañuelos blancos o blancos y rojos. Imagen de frescura que contrasta brutalmente con la abaya que obligatoriamente llevan las mujeres. Esa túnica negra, puede estar adornada exteriormente con bordados o lentejuelas, de colores incluso, aunque sin excesos. La abaya es una norma, una imposición social, una costumbre local y a toda mujer que entre en el país le ofrecen una para que se la ponga inmediatamente. La temperatura exterior oscilaba entre los 43º y los 50º. En los coches y edificios entre 15º y 16º…En tan solo unos segundos, lo que se tarda en salir y entrar atravesando una acera, la abaya se queda ardiendo y al apoyarse en el respaldo del asiento, por ejemplo, hace dar un respingo porque quema el cuerpo. El velo cubriendo la cabeza o incluso la cara, parcial o totalmente, es una cuestión religiosa. Una costumbre muy arraigada en el sector más conservador que obliga a tener la cabeza cubierta en los espacios donde haya hombres, eso sin que siquiera se puedan mezclar con ellos. Bien acotadas tras un cordón de raso rojo, teniendo que entrar antes que el resto y sentadas a una mesa lateral en segunda fila, Alicia veía cómo la Reina de corazones no podía figurar en la mesa principal por el mero hecho de ser mujer, y ahogaba las ganas de gritar aquello de “cortadles la cabeza” al ejército de naipes que coartaba su libertad, impidiéndole moverse con naturalidad y ocupar el lugar que le correspondía, entre los hombres…La liebre de marzo y el sombrerero loco, se acercaron a la mesa rompiendo el protocolo, pero como eran extranjeros en aquel cuento no llegó a mayores. Hablar con las cuatro mujeres cubiertas de negro de los pies a la cabeza, en público, va contra las normas. Las cámaras, que habitualmente evitan el objetivo femenino, claro que con el rostro tapado a ver qué interés tiene, se movían por la estancia enfocando el cuadro de luto, una novedad que no saldría en los medios (aunque en twiter si colgaron alguna foto), pero que quedaría en los archivos…Este celo por guardar a buen recaudo lo femenino ante los ojos ajenos, se relaja mucho cuando los muros altos protegen el mundo privado. Las abayas quedan a un lado y la fiesta - con agua, refrescos o “champán árabe”- transcurre informalmente. Se pide un poco de decoro en la vestimenta femenina. Los escotes y las transparencias son una provocación. Sin embargo, a Alicia le sobraron los zapatos cerrados que había llevado por si enseñar la punta o el talón del pie era pecado (Haraam) y origen de un escándalo. Las mujeres de Arabia llevan las uñas perfectamente arregladas, van super maquilladas y los retoques de bisturí no son problema a golpe de talonario. Las hay, como el resto del mundo, que solo se entretienen en eso. Pero, poco a poco, hacen deporte y compiten entre ellas en clubs privados, sin masculinos ojos que las observen pero con varonil apoyo, moral y económico en forma de patrocinadores…También hay otras virtudes, por ejemplo, tratan a sus invitados con una generosidad y una hospitalidad digna de príncipes y princesas… Es solo cuestión de tiempo, que las libertades sean públicas y los derechos fundamentales…como en occidente, donde no hace tanto que las mujeres no podían hacer nada sin la firma o permiso del hombre de la casa…¿por qué nos extraña tanto? A misa había que ir con un pañuelo cubriendo la cabeza, las faldas no podían dejar ver las rodillas, en fín, un sinfín de detalles que olvidamos tan fácilmente como Dori, la amiguita de Nemo, uy, pero ese es otro cuento…
En este país de la maravillas, Alicia vio al Conejo Blanco mirando su reloj…muy tarde es, muy tarde voy, mi cita es para hoy, no debo detenerme, ¿qué tal? …, me voy, me voy, me voy…y Alicia vio como se iba a paso ligero saliendo de un sueño para meterse en otro…por fortuna, siempre nos queda volver a donde lo habíamos dejado al despertar y pasar la puerta en el árbol para vivir más sueños soñados convertidos en realidad…



lunes, 13 de agosto de 2012

Espíritu olímpico y llamas que no se apagan

Estas dos últimas semanas hemos vivido y compartido las emociones y sentimientos de los deportistas que durante años se preparan con dura disciplina para las pruebas olímpicas que en unos segundos o unas horas de entrega total, en la mayoría de los casos, les proclaman ganadores de medallas o títulos olímpicos. En vivo o a través de los medios de comunicación, les animamos hasta el último instante a no rendirse, a seguir luchando por conseguir sus sueños que hacemos nuestros, porque compartir la esperanza de los logros, aunque sean ajenos, nos hace sentir mejor, incluso felices cuando les vemos llegar a la meta, darse al máximo, llorar de alegría por el triunfo o de pena por no haberlo alcanzado. Llanto de frustración, llanto de agotamiento, de incredulidad, ante la hazaña realizada. Es deporte, sí. Deporte que ayuda a canalizar la energía que nos mantiene vivos, que nos enseña que el esfuerzo, el trabajo serio, la dedicación y la entrega tienen recompensa. No siempre se refleja en el brillo de los metales, pero siempre luce la satisfacción de haberlo intentado. Estas emociones extrapolables a la vida cotidiana, nos dan ánimos y fuerzas para seguir esforzándonos en superar nuestros límites, en modificar actitudes y reacciones cuando tomamos conciencia de lo que no estamos haciendo de la mejor manera. No es fácil, claro que no, pero viendo cómo se dejan el alma este puñado de deportistas en cada salto, en cada zancada, en cada carrera, pensando en lo que han tenido que posponer o en lo que han renunciado por conseguir su sueño olímpico, crece el sentimiento de que este espíritu olímpico contagia al mundo siquiera por unos días cada cuatro años. Las proezas de los que llegan al podio sin más ayuda ni estímulo que el de unos pocos, hacen reflexionar sobre la importancia de creer en lo que uno considera que merece la pena y en aprovechar las oportunidades.

Estas últimas semanas de juegos olímpicos, no han sido solo de lucha por obtener un triunfo deportivo. La llama olímpica ya se apagó, pero desgraciadamente las llamas que están devorando nuestros montes no se extinguen. El fuego se está cebando con lo poco que nos queda de pulmón verde, algunos bosques son de valor incalculable para el planeta y para los seres que lo habitan. Más trágico todavía, si cabe, es la desazón, la desesperación de aquellos que tienen que ser evacuados de las zonas de peligro, abandonando sus enseres, sus casitas, sus recuerdos, sus tierras, sus animales, toda su vida, sin saber si a su vuelta lo encontrarán tal cual lo dejaron o habrán sido pasto de las llamas. Sin medios suficientes para combatir el fuego, en un territorio alejado en un país que solo piensa en estas Islas Afortunadas como reducto de sol y playa cuando nieva y hace frío, no hay un equipo permanente de helicópteros e hidroaviones que permitan atacar desde el primer momento los focos que pronto se convierten en un infierno. Ninguno de los incendios que azotan España es más o menos importante, pero lo que sí lo es, es la desidia y la dejadez, la falta de previsión, de personal técnico especializado no solo para tratar con el fuego, sino con las personas que deben ser evacuadas. Se gastan las energías en disputas absurdas y de poca monta, en discusiones políticas que no resuelven los problemas. Como los medicamentos que no curan sino mitigan un poco la molestia o el dolor, sin que se haga nada para solucionar la causa que además provoca otros males. Se ponen tiritas en heridas que necesitan puntos de sutura y se recetan antinflamatorios en lugar de averiguar de dónde viene la inflamación. Batallas por la conquista de mercados y votos que distraen la atención de las cosas realmente importantes. Se nos quema la vida y no ponemos remedio a tanto desatino. Le echamos la culpa a los otros, pero todos tenemos nuestro grado de responsabilidad. Hay árbitros malos, que determinan un partido o una prueba, como en cualquier profesión. No por eso debemos perder la esperanza, ni dejar de luchar, porque en cada uno de nosotros bulle una chispa que nos enciende cada día para seguir adelante, aunque a veces solo parezcan ascuas. Cambiemos leyes y normas, pero concentrémonos en cambiar siquiera un poquito de nosotros mismos. Quizás así, los únicos fuegos que contemplemos sean artificiales, esos bonitos juegos de luces y bombazos sonoros que nos hacen mirar al cielo embelesados, como en una noche de estrellas fugaces, que no son estrellas, pero nos hacen soñar y pedir deseos…



miércoles, 25 de julio de 2012

Del tifón Vicente y otras tormentas

Amaneció el día con una notificación de la llegada de un tifón por debajo de la puerta de la habitación del hotel, en la que se especificaban las pautas de comportamiento según se fuese declarando la alerta. Ajenas a ese tipo de situaciones de emergencia y prevención, la conversación durante el desayuno pasaba de este hecho casi inminente a los puntos que se tratarían en la reunión programada. El vuelo era a las 19’05 y entre las 17’00 y las 20’00h el pronóstico era de alerta 8. Si despegaría el avión o tendrían que quedarse en tierra hongkonesa fue una incógnita durante todo el día. Ya empezaba a llover con fuerza, pero de momento no era necesario cancelar la reunión. Federica, Chen y Catalina se subieron a un taxi que las llevó a la oficina del Secretario General que las recibió muy interesado en el proyecto de colaboración y tuvo la amabilidad de llevarlas en su coche al hotel, ya que empezaba a ser difícil encontrar un taxi disponible con el tifón tan cercano. El agua que caía del cielo se escurría como un manto sobre las paredes de los edificios. El viento soplaba poco a poco con más fuerza. Cerraron las maletas y llegaron al aeropuerto como en una cuenta atrás para un final incierto. ¿Despegaremos? ¿Enviamos nuestras últimas voluntades a España vía sms?...las risas y las bromas espantaban los nervios, aunque tampoco eran muchos. Después de todo, la llegada a Shanghai una semana antes también había estado marcada por una tormenta tan fuerte que obligó a los pilotos a desviarse y tomar tierra en Hangzhou, una ciudad cercana donde con las puertas del avión abiertas y, sin saber muy bien la tripulación cuál era el protocolo a seguir, las tuvo en primera fila pegadas a la ventanilla en la pista de despegue más de lo previsto, ya que a punto de arrancar llegaron los rayos y los truenos y los relámpagos…También de Shanghai a HongKong el espectáculo a miles de pies de la superficie terrestre recordaba la nave espacial de “Encuentros en la tercera fase” cuando la comunicación entre los terrícolas y los extraterrestres era a través de notas musicales que se iluminaban, como la sinfonía de luces y sonido en la Avenida de la Estrellas con la vista nocturna de la ciudad de Hong Kong totalmente iluminada…Ya en el avión, la espera al turno de despegue acrecentaba la incertidumbre…llovía a mares, las banderas de los señaladores en la pista ondeaban no solo por los movimientos de las manos…la estela de agua que salía de entre las ruedas y la pista dejaba olas en el aire…uno, dos y hasta tres aeroplanos en cola…quedaba poco tiempo de margen para que el tifón obligara a cerrarlo todo y cancelar vuelos, negocios, tertulias y algunas vidas…No despegaremos, pensó Catalina en algún minuto de la espera, con tanta agua encima el avión no podrá…rugido de motores al máximo rodando por la pista desafiando al destino…vamos, sí que se puede …ya en el aire, los fogonazos parpadeantes con unos segundos de diferencia contrastaban con la negrura de los nubarrones gigantes...Al fin y al cabo, pasar por Hong Kong de salida de China como colofón a un viaje por trabajo que había salido muy bien, reunirse con un señor llamado en “occidental” Vicente y que el mismo día del encuentro y partida se acerque un tifón del mismo nombre no tendrá que ver más que con las casualidades, pero no deja de tener su “aquello”.



(Blogger no me deja colgar mis fotos...fallo técnio supongo, sorry)


sábado, 7 de julio de 2012

La partícula de Dios

Quizás porque no hay dos sin tres, porque a perro flaco todo son pulgas o porque las desgracias nunca vienen solas, sea que en estos tiempos de cambios turbulentos la partícula ultraminúscula, esquiva, invisible, discreta, que durante un siglo ha mareado a las mentes más brillantes del mundo de la ciencia y la investigación, a aquellos que como Einstein la intuían pero no consiguieron demostrar su existencia, se dejó encontrar…Quizás porque, como dice Jose Luis Sampedro, la falta de valores de esta civilización nos ha llevado a un estado de barbarie insostenible y que por tanto está llegando a su fin, se está destartalando para limpiar el espacio y poder construir algo nuevo…Y en estos tiempos y en estos espacios surgen nuevos matices de conceptos viejos que le dan un nuevo sentido al vocablo y a lo que implica. Por ejemplo, Vacío: aquello que queda cuando se quita todo lo que se puede quitar. El vacío no es la nada, es una substancia permeada por el campo de Higgs, que a su vez es una substancia que permite a unas partículas ejercer una acción a distancia sobre otras…Partículas con carga eléctrica interaccionan entre sí a través del campo electromagnético. Una vibración del campo de Higgs es lo que se llama bosón de Higgs y a esta partícula que queda cuando ya no queda nada de todo lo que se puede quitar es a lo que han llamado la partícula de Dios, porque esa ínfima vibración puede explicar científicamente el origen del universo y rematar la teoría incompleta del Big Bang…¿y no podría llamarse también la partícula del amor? Porque después de todo, el amor es aquello que queda cuando se quita todo lo que se puede quitar…el amor que lo es todo, bien distinto de la nada…

 

lunes, 18 de junio de 2012

Triosofía + Alfredo Llanos en la batería

  Dos guitarras y un contrabajo se juntan para tocar la música que les gusta. Se lo pasan bien y congregan a los colegas en el Café 7. Un local pequeñito en el centro de La Laguna en el que la temperatura era tropical de tantos que lo llenaron. Una batería se les unió en esta ocasión y la verdad es que escuchando el repertorio variadito (The Police, Pat Metheny, Rubén Blades, Brad Mehldau, Baden Powell, Yamandú Costa, etc) con los amigos y una cervecita, se pasó una velada de lo más agradable.



Bring on the night, The Police.

Trisofía: Jorge Hdez Batista, guitarra
Agustín Pérez, guitarra
Carlos Costa, contrabajo
Alfredo Llanos,batería

domingo, 20 de mayo de 2012

Diario de una vértebra rota

Abrazo con el universo...
De Frida Kahlo.
Cuando Kova le contó a Matilde que se había fracturado una vértebra a pocos días de estrenar una obra de teatro y de afrontar una mudanza de apartamento, le dio el título para un texto de lo cotidiano: Diario de una vértebra rota…Me siento Frida, se lamentaba Kova… Pobre, con lo ilusionada que estaba ella con la novelería de aprender a montar a caballo y la bestia que se encabrita y la tira al suelo…crack, por fortuna, porque Dios aprieta pero no ahoga, la fractura era limpia y estable, no necesitaba operar y con un corsé durante un mes se le iría pegando sin más artificio. A través del muro del Facebook convocó y organizó los turnos de visita y el traslado de muebles y enseres de una casa a otra. No le salió mal después de todo. Ahora está feliz con su nuevo balcón abierto (1). Matilde recordaba los turnos inexistentes en la práctica cuando sus roturas de huesos reunían a los amigos en una tertulia de lo más animada en la que solo le faltaba servirles ella misma el té. Jajajaja. Indudablemente, es en esos momentos de debilidad física y desánimo emocional que el cariño de las personas que nos acompañan en la vida te ayuda a fortalecer el ánimo y sanar más rápido. Pasa como en un abrazo sin palabras. Mil cosas que contarse apretujadas en la garganta desesperadas por salir dejan de tener prioridad cuando las energías corporales que entran en contacto en un abrazo serenan la mente y equilibran el espíritu en un par de suspiros…Un lenguaje silente más efectivo que cualquier discurso…La mejor medicina, que puede crear adicción...como la de disfrutar de desayunar un croasant los domingos por la mañana escuchando a Bach y somnolienta echarlo de menos con una palmerita de hojaldre en la boca y Gluck o Handel en los oídos…La espalda cruje, se queja. Las nubes negras cargadas de agua que amenazan con acabar de sopetón con la ola de calor, parecen colarse en el tuétano de las vértebras sensibles y no hay ni faja ni corsé que alivien los tirones y latigazos que el cambio de presión atmosférica ejerce igualmente sobre puertas y ventanas de madera, hierro, aluminio o cristal. Al mal tiempo buena cara, dice el refrán. No te desesperes, le animó Matilde. Ya sé que es cuestión de paciencia, ya, rezongó Kova. Bueno, piensa en que es algo pasajero, la pobre Frida sí que lo tuvo que pasar fatal toda su vida. Ya, pero eso no me quita el dolor. Ya, pero ayuda a relativizarlo. La actitud cuenta. El dolor no desaparece, pero el sufrimiento sí…cómo…pues no sé, pero habrá que conseguirlo. Que duele, duele, vale, pero si aceptamos que las cosas son como son, entonces no hay sufrimiento…¿? Porque lo que es ahora luego no es…ufff, ya, menudo rollo, sí…o no…jajaja. Tarderemos un poco en cogerle el tranquillo, ya...Habrá que meditar-lo…

La columna rota. Autorretrato,
de Frida Kahlo

(1) http://conhdehechizo.blogspot.com.es/2012/05/mi-nuevo-viejo-balcon.html

martes, 1 de mayo de 2012

Como un pescado

Lola se despertó aquella mañana con la certeza de haber hecho un gran descubrimiento. Se lavó la cara, se preparó el desayuno y dejó la cocina y el comedor preparados para la hora del almuerzo. Salió de la casa con las primeras luces del día y se dirigió al puerto. Las barcas de los pescadores estaban entrando y los chillidos de las gaviotas avisaban de que alguno ya había empezado a limpiar su captura. Con la cesta cargada en la cabeza, Lola intentaba descifrar la certeza con la cual se había levantado de la cama, pero no conseguía dar con el dichoso descubrimiento…Se sentía rara, como preparada para aceptar una gran verdad, de esas que te dejan cabeza abajo haciendo el pino, pero convencida de que sería absurdo rehuir lo que quiera que fuera a pasar... Buenos días, Rogelio, se dio bien la faena? Bueeeeeno, no estuvo mal…Al doblar una esquina el aire fresco del mar le hizo estremecerse. Se acurrucó en su chaquetilla de lana, aseguró la cesta en la cabeza y siguió camino rumiando sus pensamientos. Lola llevaba días como enfadada con el mundo y sobre todo con ella misma por sentirse así. Aunque solo fuese por esa sensación de no estar a la altura de las circunstancias, de ser incapaz de dominar en todo momento su carácter, de traicionar sus buenos propósitos y no dejar de manifestarse con tanta vehemencia y pasión, sabía que eso se compensaba con otras virtudes, pero no podía dejar de darle vueltas… Le habían hablado de la depresión, pero no. No era eso lo que le estaba afectando a ella. No. Lola llevaba toda su vida tratando de entender el sentido de la existencia. Había vivido, sí, y bastante bien, pero Lola quería entender, por ejemplo, por qué la llamaron Dolores al bautizarla, y no porque el nombre en sí le resultase feo, sino por lo que implicaba. Dolores de padecerlos o hacerlos padecer…ninguna de estas posibilidades era muy jocosa. Lola sin embargo, era más jovial. Quería resolver esos misterios que llevan persiguiendo a la humanidad desde tiempos inmemorables… inmemorables…últimamente le señalaban que su buena memoria quizá no fuera tan buena, no porque su capacidad para recordar fallase, sino porque vivir con el pasado tan presente no era saludable. Lola le daba vueltas y más vueltas. No tenía la impresión de que estuviese viviendo en el pasado o con él. Lo usaba de referencia. Simplemente. La esperanza de ver cambios le hacían comparar situaciones, reacciones y consecuencias. Necesitaba comprobar que el esfuerzo diario daba sus frutos. Que el levantarse por las mañanas, trabajar, ocuparse de los suyos y ayudar en lo que fuera menester eran las bases para tener una buena vida. Aprender de los errores era su máxima, pero Lola se mortificaba cuando se equivocaba en algo. Llevaba una vida sencilla, aparentemente…En su interior, las historias no contadas, las leyendas de los aventureros, la curiosidad por casi todo la sumían en un torbellino de emociones que la terminaban mareando como cuando una mala mar balancea sin reparos a los tripulantes de un barco a la deriva. Lola daba vueltas y más vueltas. Esperando la ola que la dejara patas arriba…Llegó a la lonja y entre saludos cordiales escogió el pescado. Lo metió en la cesta y lo cargó sobre su cabeza…Como un pescado, pensó...Ya en casa, con una pieza sobre el poyo de la cocina, atinó a vislumbrar la certeza con la cual se había despertado. Ella era como un pescado. Podía ser sanísimo, gustoso y tierno, pero tenía espinas…Espinas más o menos grandes, más o menos fáciles de encontrar y apartar antes de masticar el bocado…Espinas que quitan el apetito por comer pescado…Trató de dejarlo lo más limpio que pudo. Se puso las gafas para que no se le escapara ninguna y los miembros de su familia no se atragantasen o rechazasen el manjar…De repente, volvió a verse como un pescado, todos somos como un pescado, pensó…daba igual que quisiera limpiarlo bien, siempre habría alguna espina que se escapase y fuese a parar a la boca del más melindroso con ellas…daba igual el esfuerzo que hubiese hecho, la espina haría de las suyas y se sentiría mal por no haberla visto… entonces ¿qué? ¿valdría la pena?¿lo aparto o lo sirvo en el plato? , farfulló. ¿Como o no como pescado?...



martes, 24 de abril de 2012

"2012 Mayas. Los señores del tiempo", de Miguel Blanco

En edición de bolsillo, tapa negra con un calendario maya en la cubierta, el libro llamaba la atención entre los montones de títulos del expositor. Uno más en esta época, quizá, si no estuviese firmado por Miguel Blanco, el periodista y buscador de misterios cuyo programa de radio Espacio en blanco (RNE), llena las madrugadas del fin de semana. El libro viajó conmigo y me acaba de regalar un viaje extraordinario al presente continuo descifrando sueños, emociones y misterios de tiempos y lugares remotos. El protagonista de la aventura comparte de forma amena y con mucho ritmo sus vivencias en la búsqueda de respuestas a preguntas que no son fáciles de contestar. Sus rituales de iniciación y sus soledades en el interior de las pirámides sobrecogen por la desnudez con la que se muestra. La del dolor infligido a los otros, reflejado en sus ojos hasta que es sentido de verdad en lo más profundo del ser, es desgarradora. La interpretación de las profecías mayas y los acontecimientos de estos años de cambios y sacudidas bestiales no es catastrofista, sino que advierte de la necesidad de cambiar de rumbo para evitar que se hagan realidad, ya que el hombre decide siempre su destino…
…El fin de los tiempos es una época de conflictos y grandes aprendizajes, de guerras, separación y locuras colectivas que generará, a su vez, procesos de destrucción y evolución.


Esto producirá cambios físicos en el sol y en la tierra y cambios psicológicos en el hombre, alterando su comportamiento y su forma de pensar y sentir. Se transformarán las relaciones y los modos de comunicación, los sistemas económicos, sociales, de orden y justicia, cambiarán las creencias religiosas y los valores aceptados, el hombre se enfrentará a sus miedos y angustias para resolverlos…De este modo podrá sintonizarse con el planeta y con el universo…

Pero en esta aventura, no sólo se estudia a los mayas y sus profecías; también comparte otras teorías - como la del centésimo mono o de los seis grados- y testimonios vivos, como el de Joe Dispenza, un revolucionario del mundo del conocimiento espiritual, por su curación a través del poder de la mente. (Un accidente le fracturó varias vértebras. Los médicos solo veían la posibilidad de soldar algunas de ellas dejándole con dolor y movilidad reducida. Como quiropráctico, Joe asumió el riesgo, rechazó la operación y “pensó” su camino hacia la curación. A los 3 meses estaba andando.)

Calaveras de cristal, conexiones increíbles, estatuas que hablan, viajes por todo el mundo, una locura aparentemente sin sentido que engancha desde la primera página a la última, y te lo creas o no, resulta de lo más entretenido.

Gracias Miguel por compartir. Seguimos conectados...



domingo, 22 de abril de 2012

Eres un sol, Enciende la Tierra: Encuentros en el fin del mundo y la Retrospectiva de Steve Mc Curry

“Eres un sol”. “Oh, sí, ¿no ves?”. “No me contradigas”. “Ejem, no copies lo que te digo yo”. “Aprendo rápido”...Estas pocas palabras me dan la entrada... Un sol que no se agota, que ilumina y calienta…que ahora pasa por una fase de cambio con esas manchas solares que escupen fuego…reequilibrarse para seguir...que enlazan con el Foro que  Enciende la Tierra (organizado por la obra social y cultural de CajaCanarias) en el que los participantes no están ofreciendo nuevas claves para entender nuestro tiempo. Hace más de 20 años que tratan de hacer entender al resto que nos estábamos equivocando…solo que no se les escuchaba. Ahora, cuando truena, es cuando nos acordamos de Santa Bárbara…Dice el refrán que “la letra con sangre entra”, y debe de ser por eso por lo que ni siquiera ahora, en estos tiempos de cambio y recapacitación, entonamos el mea culpa convencidos de que hemos errado…Se exigen disculpas y toda España se exhibe solidaria y respetuosa con los animales y el medio ambiente. ¡Cuánta falsedad! Hace una semana, hacerlos recapacitar sobre el amor a los animales era objeto de burla y desdén, porque el progreso y el humano no son extinguibles. Hoy todo el mundo se ha vuelto verde… de envidia…Ya no es posible pedir un crédito al banco para comprar un bolso de 1200 euros cuando tu sueldo no pasa de mil. Se acaban las subvenciones y ayudas varias. Pagan justos por pecadores, como siempre, desde que el mundo es mundo…La crisis se genera por éstas y otras inconsciencias, muy típicas de la estulticia del hombre –y la mujer, otro gasto inútil de papel y tinta- que se siente mejor cuando se ampara o siente amparado por la masa. Masa que no se ha parado jamás a reflexionar sobre su parte de responsabilidad en todo este caos y vomita su rabia contra la diana más visible. En fin, lejos de defender o atacar, de juzgar a inocentes y /o culpables, sí creo que TODOS deberíamos serenarnos un poquito, tomar aire, bien tomado y soltarlo lentamente, poco a poco, ¿para qué? Para mejorar nuestro sistema respiratorio¬ nuestro sistema nervioso¬ nuestra mente¬ nuestra capacidad de reflexión, como herramienta de análisis y proyección, como los rayos solares…Podemos vivir sin el último modelo de coche, de teléfono, de pantalón, aunque no lo creamos, podemos vivir sin comer y sin beber durante días. Sin embargo, si no respiramos morimos asfixiados en unos cuantos minutos. También dependerá de la calidad del aire que respiremos, pero es igual, seguiremos siendo la especie que peor se adapte a los cambios y dará igual que desaparezcamos. En la Antártida, rodeados de infinidad de organismos más o menos microscópicos, se encuentran distintos seres humanos con distintas inquietudes, pero con un denominador común: no encajan en el sistema que hoy se está desmoronando y tratan de encontrar respuestas en un entorno aislado y puro. El documental “Encuentros en el fin del mundo”, ofrecido por CajaCanarias, muestra una variopinta conjunción de personajes fascinados por lo que encierra esa masa blanca de hielo sobre el continente apenas conocido y del cual ricos y poderosos quieren extraer sus riquezas, más allá del conocimiento en general y de nuestra especie y nosotros mismos en particular. Me encantó la película de Werner Herzog, porque no es un panfleto propagandístico sobre una idea u opinión, sino un escaparate magnífico sobre lo fácil que es convivir con lo diferente sin renunciar a lo propio, sin avasallar ni dejarnos avasallar por un supuesto más fuerte. La bondad, el ser pacífico, tolerante y que cede, no implica sumisión, ni falta de carácter. Más bien al contrario, implica ser mejor persona, aunque como el sol, suelte fogonazos chamuscando un poco al desprevenido, pero capaz de regenerarse y seguir dando luz para que la vida continúe, de ésta o de otra manera. La exposición Retrospectiva del fotógrafo Steve Mc Curry es una maravillosa oportunidad para darnos un viaje a través de sus imágenes de las consecuencias de las guerras y los conflictos entre paisajes de una belleza inenarrable…

viernes, 6 de abril de 2012

Y por fin llovió…Semana Santa pasada por agua…bendita



Y por fin llovió…y como dice el refrán…nunca a gusto de todos…Semana Santa pasada por agua más que nunca bendita como un regalo del cielo para suavizar un poco el horror del infierno que estamos padeciendo. Pero si en dos mil años que hace que un Ser Divino tuvo el Valor, el Amor y la Entrega para morir en la Cruz por nosotros, un manojo de ignorantes egoístas sin más miras que ejercitar nuestra santa voluntad caprichosa, irreflexiva y volátil, no hemos cambiado en casi nada y los mensajes, las señales y las enseñanzas no hacen mella en nuestros espíritus, ¿seremos capaces de entender algo, por ínfimo que sea, del misterio de la vida? Creyentes o no, en el más allá en el más acá, en la ciencia que consigue ir explicando, poco a poco, con cifras y letras lo que cuenta el Libro Sagrado plagado de inocentes interpretaciones ante hechos absolutamente inexplicables por su intangibilidad, su invisibilidad a los ojos de los corrientes mortales, torpes, prepotentes y vanidosos por el simple mérito de considerarse mejores que los demás por tener un euro más, unas llantas más brillantes o un cargo que los saca en los periódicos y en la televisión, o una arruga menos como símbolo del pacto con el diablo que habita en algún rinconcito de nuestro yo, creyentes o no, en una fuerza absoluta que cansada sigue dándose resignada a no ser entendida ni siquiera escuchada, como padres que no consiguen que sus hijos entren por vereda, equivocados o no, los unos y los otros, creyentes o no, en la bondad y la compasión, en la maldad y la venganza, seguimos errando y tratando de encontrar nuestro camino. Un camino lleno de piedras que nos hacen tropezar, retroceder, rectificar y hasta rendirnos. Rendidos llegamos a quedarnos quietos y es en la quietud que no nos queda otra que hacer examen de conciencia y descubrir que es posible redimirse. Que si rectificar es de sabios, es posible trabajarse la torpeza, la prepotencia y la vanidad. Que aunque no lo entendamos, el dolor nos hace ser conscientes de nuestras debilidades. Hoy, Viernes de Dolor, es un día estupendo para salir de la rutina, en la playa disfrutando del mar y sus iones, en el campo en una primavera invernal, en casa o en procesión acompañando a los Pasos que nos recuerdan el sufrimiento propio y ajeno, que la Resurrección es un milagro, que la Fé mueve montañas, que la solidaridad de las gentes es un magnífico estimulante y que no hay mal que cien años dure…La lluvia que tanto se ha hecho esperar estos últimos meses de sequía tiene que caer justo en estos días de descanso y recogimiento ¿por qué? Quizás sea solo para recordarnos que el hombre propone, pero Dios dispone. Que siendo capaces de modelar todo nuestro entorno y nuestra existencia como consideramos que más nos conviene, todavía hay fuerzas que no podemos controlar y hace su santa voluntad, fastidiándonos las vacaciones, impidiendo que las imágenes idolatradas salgan en procesión, chafándonos las expectativas y haciéndonos sentir impotentes, como ante una huelga de pilotos. Obligándonos a aceptar que nuestras prioridades no son compartidas y que tenemos que decidir si dejarlas como están o modificarlas en mayor o menor medida. Observando la naturaleza del paisaje y del ser humano, el dolor que es capaz de infligir y padecer, no podemos más que renovar nuestros votos de esperanza en un mundo mejor, más justo, más armonioso, en paz y libertad para desarrollarnos y avanzar enriqueciéndonos de los valores universales en el duro Camino de la Vida…¡Feliz Resurrección!

Santísimo Cristo de La Laguna.
Autor: Dèsirée Martín

sábado, 24 de marzo de 2012

Volver a Chagall, al Jardín olvidado, a Años de prosperidad...Sobre el olvido

La exposición de Chagall en Madrid, como otras veces le había pasado, le dio la perspectiva que quería y necesitaba de un autor del cual conocía obras sueltas y puntuales que no le valían para “conocerlo”. Como en las relaciones personales, en las situaciones coyunturales o en cualquier ámbito de la vida o que le afecte, la visión del todo permite tener un ángulo mucho más amplio que la mera observación de un punto, de un hecho puntual. Todavía embriagada por los colores tan vivos del artista ruso y su desnudo rojo, Nicolasa llevaba toda la semana con el cuerpo como una madera que cruje, se hincha y encoje según ande el tiempo atmosférico. Con Venus y Júpiter expandiendo el amor, Marte, guerrero, vigilante al este y la Luna a puntito de llenarse, el suave mecer de las olas amenazaba con transformarse en maremoto. Después de todo es marzo, horribilis, aunque Nicolasa no tuviese claro porqué esta época del año se llenaba de púas cual erizo. Las manchas solares están descargando una energía bestial sobre la Tierra, si bien se desconoce por supuesto la repercusión en sus habitantes. La tragedia sigue formando parte de la vida. En forma de accidente inexplicable en Suiza con 28 muertos, 22 de los cuales eran niños, que venían de esquiar felices. Más niños, 3, y un adulto asesinados esta vez, fueron blanco de un tipo que acorralado por la policía francesa durante 30 horas, que si entrenado en Afganistán, que si con pena de no haber matado a más…parece ser que finalmente se tiró por la ventana en medio del tiroteo…Nicolasa llevaba unos días tropezándose con el olvido, con la falta parcial o total de la memoria de los que le rodean, de ella misma y del ser humano como especie. Aunque un animalito maltratado también llega a olvidar ese pasado amargo, angustioso y lastimoso que le hace enseñar los dientes cuando una mano se le acerca para acariciarlo, a base de cariño y confianza, aun tardando en aceptar que no todos quieren hacerle daño…Olvidamos para sobrellevar la vida, las penas, los errores, el dolor de un recuerdo, la ausencia de alguien o anestesiar el anhelo de un cambio que nos da miedo…Instinto de supervivencia contra sentimientos, actitudes y acciones que podrían no solo sanar, sino enriquecer nuestra vida, nuestra existencia…Luchar contra nuestras propias contradicciones es agotador y puede encerrarnos en una coraza que difícilmente deja entrar o salir la luz que nos mantiene vivos, porque la oscuridad nos merma como a una planta, incapaz de realizar su fotosíntesis…Sin fotosíntesis no hay oxígeno que nos mantenga vivos para reír, llorar y luchar contra la tragedia, contra el mal que sí existe porque hay personas malas, con maldad que tiñen el cielo rojo como en la telenovela en la que una vieja ruin hasta decir basta le ha hecho la vida imposible a unos pobres enamorados durante más de 20 años, matando, mintiendo y presignándose en nombre de un dios que nada tiene que ver con Dios. Cruzadas absurdas entre gobiernos en nombre de la fé siguen batallando…El amigo musulmán (Morgan Freeman) de Robin Hood (Kevin Costner) gritó a los ingleses del bosque de Sherwood: “Yo no soy de los vuestros, pero lucho con vosotros. Si queréis ser hombres libres tenéis que luchar por vuestra libertad contra el villano que os mantiene esclavos…” Y estas batallas se libran desde que el mundo es mundo y el hombre se hace hombresapiens y al mismo tiempo que evoluciona su cerebro para enriquecer su memoria, atrofia el compartimento de los recuerdos para olvidar…


Nicolasa acaba de disfrutar tremendamente con El jardín olvidado, de Kate Morton, una historia de pasado, presente y futuro en Australia, Londres y Cornualles, en el que las vidas de las protagonistas en distintas épocas, se relacionan, se entrelazan y reencuentran, encajando las piezas como si de cajas chinas se tratara, dándole sentido a ese todo que intuía, mientras recopilaba las partes. ¿Y después de este éxtasis? Nicolasa tomó otro libro que tenía a mano, después de todo va sobre la China actual, sus gentes y sus cambios… Años de prosperidad, de Chan Koonchung… no puede ser…a medida que Nicolasa pasaba las páginas poco a poco enganchada a la novela descubre que la trama gira en torno a la amnesia colectiva de una sociedad que se ha vuelto muy “happy”, ¿será una señal premonitoria? ¿nos iremos olvidando de todo, de nosotros mismos incluso, a cambio de vivir “felices”?

"Haz caso a las señales"…

Volver al jardín olvidado…recuperar la memoria…encontrar nuestra identidad para vivir libres…¡Feliz primavera!

Costa norte de Tenerife.


sábado, 3 de marzo de 2012

Pónte en mi lugar ¿Otra vez? Pónte tú en el mio. Sí, las veces que haga falta.

Nos cuesta. Nos cuesta ponernos en el lugar del otro. Sea lo que sea, no conseguimos ponernos en su situación, en su pellejo o en sus zapatos. Lo de los zapatos es más entendible por eso de que cada uno pisa de manera distinta y los amolda según su estructura corporal, pero quizás sea por eso que nada más calzarnos las babuchas de otro comprendemos que su forma de andar por la vida es otra diferente a la nuestra, ni mejor ni peor, tan solo diferente…Somos inconscientes de que aparcamos mal el coche al obstaculizar un paso de cebra, hasta que necesitamos hacer uso de él como peatones y no podemos, cuando necesitamos una rampa y solo hay escalones, cuando necesitamos un servicio médico que no existe porque no hay mucha demanda, cuando necesitamos hablar y el otro prefiere el silencio…Solo se nos despierta la consciencia y se abre nuestra capacidad de comprensión cuando realmente conseguimos ponernos en el lugar del otro. En ese momento, lo que éramos incapaces de entender se vuelve comprensible y vemos lo limitado que teníamos nuestro campo de entendimiento. Hay un punto de rubor, de vergüenza incluso, al descubrirnos tan necios y tan obtusos. El “yo nunca reaccionaría así” se burla de nosotros en el instante en que nos vemos reflejados como en un espejo. En un espejo al que miramos profundamente, no para ponernos la crema en la cara o ver que no quedan restos de pasta de dientes en la comisura de los labios, sino para encontrar a través de nuestros propios ojos lo que buscamos en nosotros mismos. Esa mirada es difícil de mantener, porque el choque de la mirada propia devuelta por el espejo nos muestra una parte de nosotros mismos que no siempre percibimos. Porque no nos miramos profundamente demasiado a menudo. Es más fácil mirar al otro y que el otro te mire intercambiando una cantidad infinita de silente información. Es hermoso que un cruce de miradas sea capaz de decir todo lo que la voz no puede porque tiene un nudo en la garganta. Es mágico que lo que se desprende de ese encuentro te ponga en tu lugar y en el del otro. Y entonces ya no hace falta decir u oir “pónte en mi lugar”, porque ya te pones las veces que haga falta…




lunes, 20 de febrero de 2012

Sobre la creatividad ¡Feliz Carnaval!

Llegaron los carnavales y con ellos el invierno que no habíamos tenido. Las antiguamente llamadas Fiestas de Invierno se llenan de color, purpurina, pitos, tambores, gorgoritos de zarzuela, murgas y música bailonga. La creatividad invade las calles. Esa creatividad que en muchos solo aflora en o para estas fiestas. La imaginación no tiene límites y las agujas, hilos, tijeras y pistolas de silicona cortan y unen telas, lentejuelas, adornos variados e ilusiones. Ilusiones carnavaleras que terminan trasnochadas al amanecer el día. Nada es perdurable. Ni siquiera el amor que se desvanece en cuanto hay un problema. La noche acaba para dar paso al día. Hasta que el día vuelve a dar paso a la noche. Estos días y sus noches son de desfogue, desinhibición, atrevimiento y descaro bajo la máscara y el maquillaje. Nos disfrazamos de quienes no somos en la vida cotidiana, en quienes nos gustaría convertirnos por arte de varita mágica. Sacamos una parte de nosotros mismos o nos ponemos en la piel de otro por unas horas. A veces, la creatividad es espontánea, instantánea, como encontrar un título o tener una idea. Otras veces es más trabajada y tarda días, incluso muchos, hasta que se concreta en algo. La satisfacción embriaga al creativo que sonriente contempla su obra. Le cambia hasta el humor a este ser humano que tras una dura jornada de trabajo más rutinario que creativo comprueba que su cerebro sigue en buen funcionamiento y su espíritu aún no ha muerto. La creatividad en cualquier campo y en cualquier situación permite al hombre expresarse más allá de las normas establecidas, aunque no necesariamente tenga que transgredirlas. Simplemente, jugar con ellas. Como un niño que juega con las piezas de un lego, desafiando las leyes de la gravedad o de lo estéticamente correcto o del sentido común. Pero en carnavales, como en las artes, uno puede fabricarse una casa con la puerta en el tejado que no solo no dará el cante, sino que será alagado por su ingenio. El elogio satisface y esa satisfacción se traduce en reforzamiento de la autoestima tan machacada habitualmente por el entorno, las exigencias propias y ajenas, las frustraciones, la falta de medios, las comparaciones con los otros y la competencia desmedida. Factores malsanos que minan la confianza en uno mismo transformando el ser en otro que normalmente no le gusta nada. Algunos mutan en egos duros sobrados de soberbia que se escudan en el silencio como tras una máscara de hierro. Pero como todo, tiene su fin, se acabarán los carnavales y se caerán las máscaras. ¡Feliz Carnaval!


domingo, 12 de febrero de 2012

Whitney Houston "I will always love you"

La primera vez que me enfrenté a las masas de conciertos de pop-rock fue para ver a Whitney Houston...Houston tenemos un problema...las grandes aglomeraciones de gente me daban cierto miedo, pero estaba en París, donde me quedé a estudiar algún tiempo más de lo que había pensado y la oportunidad de ver a la diva, de escuchar en directo a la voz, me empujó a pasar por encima de mis pánicos y acudir a la cita. Era el curso 87-88. No recuerdo ni el mes ni el pabellón deportivo donde se celebraba, si era otoño o primavera ni si tenía nombre el espectáculo. Quizás la entrada esté todavía en la caja de los recuerdos de París, pero no voy a buscarla ahora. No quiero datos exactos. Tan solo me ha venido el recuerdo de aquella experiencia y del vértigo que me dio encontrarme entre tanta gente por pasillos abarrotados y la escalada a las gradas. Con sudor frío me senté en la última o penúltima fila. Recuerdo muy bien la sensación de alivio cuando a pesar de lo lejos que quedaba el escenario me di cuenta de que no tenía una masa de gente a mis espaldas…podía respirar más tranquila y disfrutar de unas canciones maravillosas en una voz maravillosa…Años más tarde llegó la película de “El Guardaespaldas” y el emotivo tema “I will always love you”, qué tremenda despedida…Desconozco los detalles de su vida íntima, tan solo he sabido de alguno de los desafortunados episodios turbulentos de los que se alimentan los medios, pero me llega la sensibilidad y la emoción con la que interpreta sus temas. Es una lástima que no haya podido vivir un poco más entre los vivos, pero seguramente su voz nunca estará muerta. Descansa en paz, Whitney. We will always love you...

http://youtu.be/nPHCThqqt0s


miércoles, 8 de febrero de 2012

Cúmulos de circunstancias,cúmulos de nubes


Cúmulos.
(Foto de María Padrón)
Nubes desde el aire como algodoncitos blandos llevan el pensamiento a la frase “cúmulo de circunstancias”. Es cúmulo de nube una masa de agua con determinada densidad y forma. Es cúmulo de circunstancias lo que lleva a situaciones que normalmente se valoran como no positivas. Un cúmulo implica demasiada cantidad y por tanto ahoga. Pero son tan mágicos esos cúmulos positivos en los que la vida te envuelve haciéndote flotar como entre nubes de algodón, que eso tan acuoso, húmedo e irreal porque no te sostiene si te lanzas sobre él, resulta igual de atractivo, firme y fiable que un mar por el cual navegar con o sin rumbo. Hay despegues turbulentos con vuelo tranquilo y sereno. Los hay suaves y ligeros que atraviesan zonas de turbulencias que te hacen pensar que de un momento a otro todo acabará bruscamente. Y desgraciadamente, hay vuelos que no llegan a realizarse o no llegan a buen puerto porque los accidentes existen, en la mayoría de los casos por culpa de los humanos.

¿Qué tal la vida? Pues muy bien, con sus turbulencias provocadas por cúmulos de circunstancias, sus despegues de vértigo sobre todo en ese momento en que después de coger carrerilla los pilotos tocan la palanca de velocidad y parece que vamos a caernos por falta de potencia. Un Padre Nuestro, tres Ave Marías y un Gloria al Padre incrementan la confianza del bruscamente desasosegado espíritu. Atravesada la zona de bajas presiones, el cielo luce despejado y azul y el sol refleja sus rayos en ese cúmulo que se deshace dando vida, desperezando los instintos e impulsando a seguir adelante, gracias y a pesar de las circunstancias…

A veces, son como las cajas chinas que encajan de manera increíble unas en otras y dejan sin palabras a quienes hábilmente consideran imposible tanto talento…


Cúmulos con puesta de sol.
(Foto de María Padrón) 

Señores pasajeros, abróchense los cinturones de seguridad y permanezcan sentados mientras lo indique la señal luminosa…No se preocupen tarde o temprano atravesaremos la zona de turbulencias y tomaremos tierra…Gracias por volar con nosotrosA ustedes, dijo una señora al anunciar el comandante el cambio de una rueda que demoró el despegar en más de media hora… ¿Pero fue la rueda o la huelga de pilotos, controladores o trabajadores de una compañía que nos dejó en tierra de cualquier manera…? Miremos las nubes y soñemos como Grafía y sus fotos…Aceptemos que la vida es un simple cúmulo de circunstancias, como diría mi amiga Marcela…


El Teide y su mar de nubes.
(Foto de María Padrón)

sábado, 28 de enero de 2012

Lin Tianmiao. “The Same”

En la calle el frío gélido cortaba la respiración. Sin embargo, el cielo de Pekín lucía tan azul como los volados de los tejados de la Ciudad Prohibida que se veían a la derecha camino del Beijing Center for the Arts. La inicial contrariedad de una reunión cancelada, dio paso a la emoción de visitar una exposición de gran envergadura, incluso un par de días antes de su inauguración. Cosas del destino que juega a su capricho con estos pobres seres que tratan de entender sus artimañas, enredos y desvaríos…que vuelve locos a los genios que vislumbran un hilo de posible realidad, repudiados o burlados por esa masa que solo respira, engendra más masa y muere vacía y sin contenido...

En la entrada esperaban al pequeño grupo que acompañaba a la organizadora del evento, hermana de la artista, orgullosa y contenta del interés que despertaba la obra y su exhibición. Tres mil invitados solo para la inauguración.

Ni hao, ni hao! Puertas que se abren, escaleras normales y corrientes, cierto desconcierto y, de repente, un nicho gigante forrado de negro brillante acolchando paredes, muros, columnas y suelo. Un resto de olor a pegamento agitaba las pituitarias y la visión de los restos óseos de esqueletos en oro golpeó con fuerza el cerebro. Más desconcierto. Inseguridad. ¿Qué es esto? Oh. Vaya. Se ha invertido mucho en esta instalación. Hay mucha expectación. Lin Tianmiao es una de las artistas contemporáneas más reconocidas de China. Después del Beijing Center for the Arts se llevan la exposición al Moma de Nueva York. Oh. Vaya. El nicho negro con huesos en oro de dos plantas era solo la bienvenida. Otro pequeño tramo de escaleras normales y corrientes bajaban a las catacumbas más maravillosamente idealizadas que se puedan imaginar. Un trabajo de dos años en los que la artista se centró tras la muerte de su madre. Lo macabro de un osario cubierto de hilos de seda, cada cúbito, cada falange, las cuencas de los ojos en rosa chicle y verde pistacho como burlando a la misma muerte gritando luz frente a las tinieblas, calaveras dulces frente al dolor de lo que representan…como el sabor agridulce de la salsa china que refleja el mundo en torno al cual esa cultura se mueve desde hace milenios, ying-yang, alegría-dolor, reposo-acción, ese equilibrio tan difícil de encontrar…Armonía y belleza en la muerte, en el fin de la materia. Paz. Libertad.


Detalle de One and The Same, Lin Tianmiao.
Beijing Center for the Arts.
(foto de María Padrón)
Un prestigioso fotógrafo (cuyo trabajo se puede ver en la web) trabajaba mientras la sala estaba vacía de gente y deslumbraba con su contenido. Apetecía tocar las obras como comer una nube de azúcar en una feria. Pero lejos la intención de satisfacer el deseo, los ojos escudriñaban de cerca el trabajo de bordado de los grandes cuadros monocromáticos en plata, negro, toda la gama de dorados y amarillos y rosa…cuánto trabajo, un taller de bordadoras hizo falta para llevarlo a cabo. Ojalá que el dinero que está moviendo al Gran Dragón no termine con esos oficios de artesanía como en Occidente, que las máquinas no sustituyan la labor de infinita paciencia y amor en cada puntada y que los niños no dejen de aprender lo que es el huso de una rueca porque los editores publican en los cuentos que se pinchó con una aguja ¿por qué? ¿para evitarles el ínfimo esfuerzo de aprender una nueva palabra, quizás por ser un artilugio viejo?

The Same, Lin Tianmiao
Beijing Center for the Arts
(foto de María Padrón)

Uno de los amigos chinos que formaba parte de esta experiencia está leyendo en francés “El universo cuántico” de Brian Green. Al parecer es difícil de conseguir en China. Cuando las lágrimas de la emoción y el nudo en la garganta al salir de ese otro mundo tan o incluso más real que el que ofrece el microbús, la calle asfaltada, el aire helado, permiten expresar sucintamente la tremenda fortuna de tal vivencia, la gratitud por la gracia divina de poder vivirlo es infinita, paralela, atemporal, como ese universo cuántico mágico en el que también en la serie de ficción, la antropóloga Dra. Brenan –Bones- le dice al inspector del FBI Booth que la cuántica demostraba que el pasado, el presente y el futuro no son reales tal y como los “conocemos”, que el tiempo interacciona y el pasado se vuelve presente y futuro y futuro pasado presente…ficción- no ficción…de cualquier forma, es “Lo mismo”, “The Same”…gracias.


Detalle de The Same for N Times, Lin Tianmiao.
Beijing Center for the Arts
(foto de María Padrón)

 

miércoles, 18 de enero de 2012

Empezando…2012

El avión empezó a descender aproximándose a tierra…un dolor agudo en los oídos le obligó a echarse las manos a la cabeza en un intento inútil de parar las agujas que empezaban a perforar los tímpanos…dos golpes de tos no ahuyentaron la mortificación que una vez que empieza parece no tener fin, pero llamaron la atención de un amabilísimo auxiliar de vuelo que preguntó si solo eran los oídos…yes…ok, just a moment… apareció con un vaso con agua hirviendo y dio las instrucciones: beber a sorbitos en lo que aterrizaban para que el vapor del agua se pasara a los oídos y entre tragar y calorcito no doliesen. A él le había funcionado. Le puso unas rodajas de limón. Mano de santo. Ya en tierra, peguntó nuevamente a la pasajera si le había sentado bien. Estupendo, no oigo, pero no tengo dolor. Fantástico remedio. Thank you very much…Ganas tuvo de preguntarle si no tenía otro remedio para ese otro dolor, el que desgarra de tal forma que te deja viviendo anestesiado, just in case…Pero ya tenía en el bolso un libro que le habían recomendado con cariño y que “casualmente” encontró en una de la tiendas del aeropuerto: “La señora de las especias”, de Chitra Banerjee Divakaruni…Acababa de empezar a leerlo y ya se le encogía el estómago con las descripciones de esa vida de entrega y renuncia, de sueños hechos añicos y anhelos todavía posibles…de todo tipo de dolores posibles de describir…agujas, cristales rotos, asfixia, pánico, vértigo, vacíos varios…pero en esas primeras páginas algo la atrapó…esperanza, confianza, justicia…Vida, magia, conocimiento, a pesar de y después de todo…
La Exposición Wildlife en el Natural History Museum mostraba una vez más los ciclos de la vida…supervivencia, belleza, ternura, miedo, huida, caza, instantes capturados tras horas de espera por el cazador de momentos espectaculares…la mirada en primer plano escorzado de un rinoceronte a punto de atacar (Wim van den Heever), la pata robusta y firme de un elefante (Peter Delaney), los cuartos traseros de una jirafa cuya cola señala a otra que se acerca borrosa (David Lloyd), un blanco campo de amapolas (David Maitland), la familia de leopardos encaramados a un tronco sin ramas (Paul Goldstein) como bolas en un árbol de Navidad, la ternura de una cría de chimpancé en los brazos de su madre…http://www.nhm.ac.uk/visit-us/whats-on/temporary-exhibitions/wpy/

Los días transcurrían tranquilos en las calles de Londres. Vacaciones en familia para empezar el año con frío, rebajas y tiquets agotados para la gran exposición de Leonardo Da Vinci en el National Gallery, para el ballet…pero no importaba. Siempre hay salas por recorrer en el British Museum... El año había terminado magníficamente a pesar de las crisis de todo tipo que contaminan el entorno más aséptico. El trabajo a punto y con grandes perspectivas, el ballet de Ángel Corella y su compañía bailando al ritmo de la ELO en Barcelona como colofón a un estupendo espectáculo variado de neoclásico y clásico de tutús de plato, MOMIX celebrando en Madrid su 25 cumpleaños como compañía de danza con los mejores o más representativos momentos de sus distintas obras tan originales y mágicas como bellas y armoniosas…las flores naranjas que salen encogiditas para ir abriéndose hasta transformarse en los volantes de un traje de faralaes, la danza con estructuras que danzan por si solas, el paso a dos con equilibrios de vértigo…Delacroix se dejaba descubrir en la Caixaforum más allá de sus más conocidos cuadros de gran formato cautivando con sus trazos más sueltos y abstractos…Antonia San Juan llevó a Canarias lo mejor de su repertorio y tuvo que ampliar los días de función porque la demanda desbordó las previsiones. Se portó bien y nos dejó más risas que llanto, porque hay que verla en el escenario no solo transfigurar su papel de cómico a trágico y de trágico a cómico, sino sintiendo cómo las entrañas se retuercen pasando de las carcajadas y el dolor de mandíbulas a las lágrimas provocadas por la congoja de un corazón exprimido por la pena, la soledad, la incomprensión…Cultura, ese oxígeno para el cerebro y el alma, en cualquiera de sus esencias para combatir cualquier mal, cualquier pena, porque las tristezas se dividen cuando se comparten como las alegrías se multiplican…vaivenes de tiovivo que te marean, te embriagan y te hacen flotar hasta que te caes del caballito, te magullas, pasas el dolor y los moretones cambian de color, te olvidas y vuelves a subirte a esta atracción de feria que resulta ser la vida…Como decía el incomodador en loquepiensoloescribo.over-blog.es Empezar no es fácil y cuándo empezar tampoco es evidente, pero la frase de la autopista que nos acompañaba en los primeros días del año es clara y concisa: “Empieza hoy”… ¡¡¡Feliz 2012!!!

Sala de Egipto en el British Museum.